DÍA 7

A una sola quimio para acabar con el cáncer, así lo pensábamos, así actuábamos, era todo tan sencillo casi increíble, hablábamos de una realidad que no era la que te contaban en las películas, ella estaba llena de vida, con planes, con energía, sin muchos efectos secundarios postquimio, sentíamos cerca la victoria.

Buscamos la séptima, fuimos temprano y había más o menos movimiento, sin embargo, salimos temprano ese día, fuimos esta vez a locatel, estábamos buscando algunas cosas para Rafa, galletas y dulces especiales (sin gluten /lactosa), en ese centro comercial había varios lugares donde comer, comimos en uno justo en la salida del locatel, casualmente era de los mismos dueños del otro en donde nos gustaba desayunar, mismo estilo pero mucho más pequeño, comimos, compramos y fuimos a buscar donde hacer unos exámenes para la próxima sesión (séptima).

Justo al salir del laboratorio nos encontramos con Petra y Sharyn, (allí conocí a su amiga Petra tan sonada), Petra tuvo cáncer hacía muchos años y lo había vencido, fue cómico, estábamos caminando y escuchamos un grito "Flor mi amor" volteamos y era Sharyn, estaba con su mamá  (Petra) desayunando para ir al odontólogo, se acercaron y las conocí, Petra al verla sin cabello le dijo "¿Que fue, que paso?" ella explicó lo que pasaba, hablaron de la operación, de la recuperación, de las quimios, de los médicos, Petra le dijo al despedirse "Esto le pasa a una para aprender a vivir Flor, revisa a quien tienes que perdonar y a quien tienes que pedir perdón" en seguida ella tomo actitud de vámonos, nos despedimos y seguimos.

Seguimos en lo nuestro, ya estábamos cansadas, agotadas, así que nos fuimos a la casa, al llegar nos enteramos que la vecina de nuestro piso, Fatima, también recibiría quimioterapia, ella había sido operada años atrás, de un seno, como esta vez, le habían operado hacía pocos días y la noticia de las quimios había llegado, tratamos de darle ánimo, de apoyarla y desde allí se fortaleció una amistad muy bonita, pasa que los pacientes oncológicos y sus familiares ven la esperanza en todos lados, la viven, la anhelan, y son solidarios con solo escuchar las palabras claves, quimioterapia, oncólogo, radioterapia, en fin, hay una solidaridad muy bonita entre todos.

Fuimos a la séptima y planificamos la despedida de las quimios, solo faltaba una, entonces hacíamos planes, para la próxima, vamos a traer, tal cosa y cual cosa, y esto y aquello; haciendo planes pasamos esa sesión rapidísimo, más contentos que nunca, faltaba una sola y luego serían de mantenimiento y chequeos cada dos, tres o seis meses, estábamos felices.