DÍA 1 LA RADIOTERAPIA

Demás está decir cómo le cayó la noticia, el doctor fue muy pedagógico, nunca dijo las palabras feas (tumor, cáncer, metástasis) trabajo el tema con habilidad y astucia, y tenía que, ella era una mujer muy inteligente, cuando dijeron radioterapia se le tumbaron los brazos, mantuvo la compostura, el aplomo, era increíble, pregunto el mas mínimo detalle, el doc le explico el procedimiento (no duele, no pica)  y nos dio una orden, solo puedo decir que la mano de Dios nos permitió llegar al hospital central con prontitud para comenzar rápido las radioterapias.

Nuestra vecina Fátima estaba recibiendo radioterapia allí también, entonces cuadramos con Gaby (su hija) para que nos hiciera el "transporte" en la mañanita, ese primer día fuimos con su carpeta todos sus exámenes ordenados, los cds de las resonancias (cuello para abajo y cerebro)pasamos como dos horas el día anterior ordenándolo, llegue preguntando todo, (esa era mi misión, ser preguntona) intentaba hacer las preguntas peligrosas lejos de ella, la deje para sacar unas copias y volví, al regresar no estaba, pregunte y me informaron que le estaban haciendo una tomografía de "rutina" y unos rx para el ingreso como paciente formal, me dijo una de las muchachas de recepción "vamos a armar el expediente mientras sale tu mamá" (no la saque de su error) armamos todo converse con el nuevo doctor (lo que pude porque en verdad él no era de mucho hablar) y ella salió, todo en orden, tenía una vía puesta para la dexametasona (8mg en la mañana y 8mg en la noche) ya estaba experta preparando el medicamento y suministrándoselo, le tocaba antes, durante y después de las radios, ese día no iniciamos, era viernes, nos explicaron que para no perder la continuidad, comenzaríamos el martes porque el lunes era feriado.

Los doctores mostraron muchísimo interés en el “caso”, la miraban, veían el informe, me miraban, me preguntaban si ella convulsionaba, si vomitaba, si le dolía la cabeza, cuando respondía a todo que no y la veían caminar más era la cara de impresión de ellos, el primer día fuimos atendidas por no menos de seis médicos, todos parados frente al computador mirando la resonancia y mirándonos con cara de verdadero asombro.

Esa primera sesión era todo un misterio, asustadas las dos acudimos bien tempranito,  antes de las ocho estábamos allá, lleve agua y salí a comprar café y desayuno, la anote, y enseguida empezaron a llamar, los dividían en dos grupos, campo cuadrado y mamas, ella entraba en campo cuadrado, no lo entendí  sino hasta el final, pero desde que ella llegaba, caminando arrastrando un poco el pie derecho, pero caminando, la sentaban en una silla de ruedas y de allí hasta salir, además de la dexa (dexametasona) tomaba Fenitoina (anticonvulsivo) recetado por su médico tratante, se lo mando Flory desde afuera, aquí no se conseguía, me llamaba la atención, no pregunte nunca pero me imaginaba la respuesta, ¿porque anticonvulsivos? ella no convulsionaba, después entendí que como el tumor estaba del lado izquierdo en la zona "epiléptica", había que prevenir, lo poco que hablaba con el doc nuevo era siempre lo mismo, me preguntaba " ella vómito, ha convulsionado, está tomando la dexametasona y el anticonvulsivante" al yo decir no, no, si, si, se terminaba nuestra conversación, no era mi favorito pero que se le hace.

Salimos de la primera tal como había dicho su médico tratante, no pico, no dolió, no molesto, no nada, ella me dijo "es una luz, una maquina enorme, me ponen una máscara y listo", ese día entramos tardísimo, no lo sabíamos pero  los inicios pasan de ultimo para programar la máquina, nos olvidábamos del mundo, era nuestro momento, chismeábamos, hablábamos del hospital, de los doctores que eran jóvenes, de los pacientes, muchísima gente joven, le ponía la dexa y seguíamos esperando, al salir llamamos a Gaby y nos fuimos a la casa, agotadas pero con la tarea lista, el siguiente día sería más rápido según nos decían todos ( los otros pacientes), lo esperábamos porque estábamos agotadas.